Sony lanza una tarjeta microSD que “mejora el sonido”

Sony ha presentado un nuevo producto que ha llamado la atención de todo el mundo aficionado a la tecnología, pero no precisamente de un modo positivo. 

Se trata de una tarjeta microSD diseñada para audiófilos, o expertos en sonido y que según el fabricante reduce el ruido eléctrico producido en la lectura de datos desde la tarjeta…

 Ante estas afirmaciones, el mundo de la tecnología se ha preguntado desde cuándo una tarjeta de memoria introduce ruido en un dispositivo de audio o, si ciertamente lo hace, cómo es posible que este ruido sea perceptible entre el que puedan producir otros componentes del circuito de sonido. Lo curioso es que, a pesar de la incredulidad generalizada con respecto a la afirmación de Sony, el fabricante argumenta que su tarjeta emite menos ruido eléctrico y cree que, aunque cuesta unos 150 dólares, puede tener demanda entre el público más entusiasta del sonido, al que va dirigido, por ejemplo su nuevo “walkman” para audiófilos presentado en CES que saldrá a un precio de unos 1.200 dólares.

De un tiempo a esta parte están apareciendo algunos productos interesantes en el terreno del sonido portátil de alta calidad como el reproductor Pono creado por Neil Young, y los propios vendedores de música como Apple también están ofreciendo canciones codificadas en una mayor resolución para quienes usan equipos de sonido de alta calidad. Además, muchos fabricantes de smartphones han visto también la importancia de este factor y están introduciendo chips de sonido y conversores DAC de alta calidad en sus smartphones (el último ejemplo es el Xiaomi Mi Note).

A veces, se discute cuánto hay realmente de cierto en la mejora que ofrecen algunos de estos componentes de alta fidelidad, cuando la mayoría de equipos como altavoces o auriculares con los que se utilizan no pueden evidenciar las diferencias en la calidad de sonido (y la mayoría de los usuarios no tienen la agudeza auditiva ni experiencia para experimentar estas diferencias tan sutiles). Así, resulta difícil creer que la mejora que pueda ofrecer una tarjeta de memoria sea realmente apreciable de algún modo.